Alguien me dijo que todos llevamos un "gran lobo malo" por dentro y al cual, en lugar de negarlo, había que sacarlo a comer de vez en cuando.
Supongo que era su manera de decir que todos tenemos un lado obscuro, pero la figura me pareció especialmente interesante, de hecho estuve a punto de decir que por supuesto, que era lo más normal del mundo, pero después caí en cuenta que más valía no revolver metáforas personales.
El Lobo del cuento es exactamente la representación de cierto lado 'obscuro' de la personalidad humana y probablemente con 'obscuro' no siempre se quiera decir 'malo', sino simplemente oculto, escondido, disimulado. Y efectivamente hay que sacarlo a dar la vuelta, de lo contrario se vuelve ciertamente grande, malo y feroz. ¿No es exactamente eso el fondo de las leyendas de licantropía?
Yo no sé si verdaderamente se pueda domesticar ese lobo, pero sé que se pueden hacer buenas migas con él, pues después de todo es una parte de nosotros y quizá la más libre y astuta, así que conviene tomarlo en cuenta.
¿Qué hace el Lobo de cada quién cuando se le deja salir? ¿O acaso tiene que escapar y después se tiene un gran dolor de cabeza?
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